Con el objetivo de darle batalla a los delitos informáticos, el equipo eMozart se desempeña como partner certificado de Fortinet.
Sin importar el rubro, tamaño ni renombre, los ataques cibernéticos continúan amenazando a muchas organizaciones y la actividad de ransomware sigue siendo más alta y destructiva con respecto al 2021. Ante esta situación resulta fundamental saber cómo actuar ante ellos.
Según un estudio realizado por FortiGuard Lab, (el laboratorio de Fortinet, la multinacional líder en materia de ciberseguridad), los datos demuestran que el ransomware (o secuestro de datos) no ha bajado en relación a los números máximos del año pasado. Es decir que, los ataques a las empresas se han disparado a cifras altísimas, y esto tiene que ver con la sofisticación, agresividad y el impacto que están generando los delincuentes, ya no sólo con métodos “tradicionales” de ataque, sino con nuevas técnicas y actualizaciones de otras ya conocidas.
Según la misma fuente, las formas de malwares están basadas mayormente en los navegadores, lo cuál quiere decir que suelen ingresar a través de señuelos de phishing o scripts que inyectan código o redirigen a los usuarios a sitios maliciosos. Tres clásicos ejemplos pueden ser: los ejecutables de Microsoft Office (un excel), los archivos PDF y los scripts del navegador (un HTML).
Si bien lo ideal siempre es contar con personal o empresas capacitadas en la materia para poder afrontar estas cuestiones, el Líder del área de Ciberseguridad de la tecnológica eMozart (Córdoba), Franco Luna, recomienda “En primer lugar, las empresas deben concientizar a la totalidad de sus colaboradores sobre buenas prácticas en materia de ciberseguridad, y saber que estas cosas pueden ocurrirle a cualquiera”. Como segundo ítem importante: “si no se dispone de sistemas de protección adecuados, como protección contra malwares, utilización de contraseñas seguras, mensajes encriptados y copias de seguridad de datos, lógicamente el riesgo de ser una víctima de ataques será mayor, por lo que se aconseja avanzar fuertemente en una estrategia de seguridad para incorporar estos puntos.
Si bien Franco asegura que la problemática es muchísima más profunda y requiere de más atención por parte de las empresas, estos puntos son el puntapié básico e inicial para darle batalla a los delitos informáticos.
